miércoles, 29 de abril de 2015

POEMAS GANADORES CONCURSO LITERARIO ETIEVAN 2015

PRIMER LUGAR:   Rocío Espinoza Iº
Sin título

 Sólo en marcos se mantiene su presencia
Lo invisible sobre lo real
Se preguntan si todavía sigue cuerdo
Y el cariño más que extinto
Amarrado a un solo clavo
Se mantiene en equilibrio
Para no caer en el desconocido.






SEGUNDO LUGAR: Vladimir Varela IIIº 
Padre nuestro
Señor, hoy quiero rezar
Quiero darle las gracias
Por arrebatarme los sueños
Justo cuando los iba a alcanzar.

Quiero preguntarte, señor
¿Por qué el hombre más valiente
Es el que pasa cada noche en vela
Solo para por la mañana
Reconstruir su alma de la nada?

Responde mierda
¿Por qué dejaste que me dejaste
                Arrancándome hasta el último diente de leche a palos?

Esta es la última vez que te hablo
Ya no quiero vivir con las cicatrices del pasado
Tan solo quiero saber,
¿Cuándo venga tu hijo a salvarnos
Me vas a volver a dejar votado?





 
SEGUNDO LUGAR: Gabriela Monsalve IIº
Gana el que pierde


Juguemos un juego
Cerremos los ojos
Imaginemos
Imaginemos viajar, andar
Sin destino
Quién gana?

Juguemos un juego
Caigamos al aire
Caigamos al suelo
Caigamos desnudos
Quien gana?

Juguemos un juego
Ponte a llorar
Ponte a reír
Ponte a bailar
Ponte a SER
Quien gana?

Juguemos un juego
Juremos vivir
Juremos ser algo
Juremos sentir
Que es algo?
Quien gana?

Gana el que pierde el rumbo
Gana el que pierde el equilibrio
Gana el que pierde la sensibilidad
Gana el que pierde la razón
Gana el que pierde
Gana el que muere
Juguemos
Ganemos .








TERCER LUGAR: Florencia Troncoso IIIº
Las visitas del escritor


El Escritor:
Tristeza, oh Tristeza,
llegas a la casa de un pobre desamparado,
olvidado por los ojos de tu dios.

Melancolía, dulce amargura,
tomas mi corazón para exprimirlo y
beber su contenido como al más raro de los vinos.

Soledad, condena eterna
a la que he sido encadenado
sin poder escapar.

Sufrimiento, que me mueves
a tu gusto cual marioneta
sin vida o voluntad.

Locura, que apareces misteriosa
y me posee, que me susurra en el oído
las palabras que impregno en las páginas.

Terror, de los demonios de tinta y papel
que creé y que, por la noche

me buscan para que tema a las sombras.